Adriana Lassel, Cinco años con Cervantes

Adriana Lassel, Cinco años con Cervantes,
Argel, Instituto Cervantes, 2012, 167 pp. [NIPO: 503-12-044-1].
Traducción francesa de Yasmina Madiba, Cinq années avec Cervantès,
Argel, Dalimen, 2012, 206 pp. [ISBN: 978-9931-306-62-7]

 

Miguel de Cervantes es, no hace falta decirlo, el principal referente de la cultura hispánica. Al igual que los grandes genios de la humanidad, como Shakespeare para la cultura anglosajona, o Goethe para la germánica, son numerosas las biografías que se han escrito sobre su persona y obra. El uso y abuso de su nombre para calles, plazas, institutos, bibliotecas, etc., naturalmente produce la mitificación de su figura y la deshumanización de la persona que fue. El personaje Cervantes es ciertamente conocido como símbolo y emblema, no necesariamente como fruto de la lectura y disfrute de sus obras. Al igual que cualquier obra pictórica, su contemplación no se traduce automáticamente en comprensión, más bien al contrario, es el punto cardinal donde una constelación de dudas estalla. Paralelamente, conocer que El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha fue escrito por el licenciado de Alcalá, el manco de Lepanto, el cautivo de Argel, el vecino de los moriscos, nos habla del personaje y la obra, pero no de la persona y los motivos que subyacen al acto de creación artística, a sus necesidades de expresión. Y, en tal sentido, qué duda cabe que cinco años de cautiverio en condiciones de esclavitud y en riesgo permanente de perder la vida deben de marcar de por vida a cualquier persona. Sin embargo, no es mucha la importancia que el lector medio da al episodio argelino en la vida y obra de Miguel de Cervantes.

La novela de Adriana Lassel ―nacida en Santiago de Chile pero nacionalizada argelina― pretende paliar de algún modo esa laguna histórica entre el personaje y la persona, la que realmente sufrió y vivió, o malvivió, durante cinco años en la ciudad de Argel los mejores años de su juventud, desde los veintiocho a los treinta y tres. La obra representa una verdadera curiosidad literaria, difícil de encasillar, quizá como parte de la literatura chilena, o quizá mejor como parte de esa literatura en lengua española que se ha compuesto en Argelia desde siempre, desde la llegada de los primeros mudéjares o moriscos ladinos, romanceados o aljamiados, desde el establecimiento de presidios en plazas norteafricanas, dando forma a un pequeño pero singular fenómeno literario que hemos querido conceptualizar en otro lugar: la literatura hispanoargelina.

Empleando documentos históricos, como el acta notarial que Cervantes elevó en su defensa frente al envidioso Blanco de Paz, la Información de Argel, los propios relatos de su obra de ficción, y la reconstrucción historiográfica de los cinco años de su cautiverio, Lassel da vida a la persona del hidalgo Miguel de Cervantes, capturado por el renegado griego Dali Mami. Al descubrir la importancia de Miguel, quien tenía cartas de recomendación de don Juan de Austria, vende a su hermano menor, Rodrigo de Cervantes, a Ramadán Pachá, y se queda con el mayor para pedir un precio exorbitado por su rescate. Con el tiempo la familia reunirá dinero para sacar a Rodrigo, pero Miguel, ante la imposibilidad de rescatarse, intenta siempre la huida, en tres ocasiones, lo que hace su estancia argelina aún más precaria debido a los naturales enfados de sus dueños.

Lassel crea el personaje de Naima, una joven sefardí con la que Miguel tiene una relación íntima, con el fin de dar un poco de humanidad a esta parte oscura de la biografía cervantina. Cinco años de abstinencia no parece ser una realidad plausible en un joven soldado, por lo que Lassel recrea la posible relación con una sirvienta sefardí, una de las pocas licencias literarias que se toma en la redacción de la novela, la cual pretende ser, así lo señala la autora, fiel a los datos históricos. La gran mayoría de personajes son verídicos, como Antonio de Sosa, el que se tiene en la actualidad como autor de la monumental Topografía e historia general de Argel. En fin, como novela encontramos una trama interesante en la medida en que se recrea una de las vidas más fascinantes del Siglo de Oro español, los intentos de fuga, la separación de los hermanos, la incertidumbre por el porvenir, el necesario oxígeno intelectual que los cautivos, de diferentes países, tratan de alentar.
El texto original en español se publica en Argel por el Instituto Cervantes en una muy bella edición. También digna de reseñar es la traducción francesa (realizada por Yasmina Madiba), aparecida igualmente en Argel por la editorial Dalimen. En esta última se reproducen en el interior diferentes pinturas de autores franceses del diecinueve sobre estampas tradicionales y conservadas en la Biblioteca nacional de Argel.

En fin, nos encontramos ante una obra valiosa difícilmente clasificable, nacida desde el más clásico ideal humanístico del Siglo de Oro, pero indiscutiblemente arraigada en las dos orillas, producto naturalmente hispanoargelino que, globalmente, transciende el Mediterráneo como demuestra el origen andino de su autora, y hace ficción una de las vidas más fascinantes de las letras mundiales.

Isaac Donoso